Más de 15 mil espectadores, entre los asistentes presenciales y aquellos conectados a través de la plataforma Filmin Latino, pudieron participar en 106 actividades que incluyeron proyecciones, conversatorios, exposiciones y encuentros a lo largo de 10 días en 20 sedes de la ciudad de Querétaro y el interior del estado.
En esta edición, se proyectaron 98 títulos, de los cuales más de la mitad fueron mexicanos y 51% fueron dirigidos por mujeres. Gracias al apoyo del FOCINE, por primera vez, se otorgaron premios económicos para el programa Chimal, la competencia de documental mexicano, en sus cuatro categorías: largometraje, cortometraje, selección universitaria y selección queretana.
De manera inédita, el Festival tuvo la presencia de un país invitado, Perú, representado por DOCUPERU, una organización sin fines de lucro que desde hace 20 años promueve y organiza procesos de documentales de manera colaborativa y participativa.
Uno de los eventos más significativos y exitosos del festival fue Transprexiones, una celebración multidisciplinaria de la diversidad de expresiones artísticas dentro de la comunidad trans. El encuentro ofreció un panel y una exposición en el Museo de Arte Contemporáneo de Querétaro que incluyó actos de performance y ballroom.
Otro evento para resaltar fue la inauguración de la exposición DOQUMENTA: 10 años, en la Galería Libertad, en la cual, mediante carteles y fotografías, se plasmaron las historias del Festival a lo largo de estos años, se dio testimonio de su evolución y se rindió un homenaje a las personas que lo han hecho posible.
En la organización del festival participaron 20 estudiantes del Tec entre voluntarios y prestadores de servicio social, además de otros 10 egresados y egresadas, que, si bien en su momento entraron como prestadores de servicio social, ahora ya forman parte del comité organizador.
Para Jennifer Margain, los jóvenes voluntarios “son manos y mentes que ayudan a que esto se siga construyendo desde la multidisciplinariedad del equipo, porque no nada más participa gente que está estudiando comunicación, también hay arquitectos, ingenieres, animadores y otras carreras que nos nutren en todas las áreas con su pasión y compromiso”.
Ante el reto de asumir por primera vez la codirección del festival, la maestra Margain comenta: “Es un rol muy exigente y retador que me permitió ejercitar mis competencias de organización, atención al equipo, cuidado y paciencia, para hacer todo lo posible que está en mi círculo de control y soltar aquello de lo que no tengo control”.
El equipo de DOQUMENTA sueña con convertirse en una referencia del cine documental a nivel internacional, dar un espacio a las narrativas de no ficción para conversar de los temas que nos atraviesan, y seguir generando diálogos para construir y convivir en este mundo que es plural y diverso.