Desde sus inicios, el Tecnológico de Monterrey se ha distinguido por su visión humanitaria y su propósito de formar profesionistas de alta calidad humana, líderes involucrados con el bienestar y el desarrollo de sus comunidades. Sin duda, la misma fuerza motivadora se encuentra detrás de World Vision, una de las organizaciones no-gubernamentales con giro humanitario más grandes del mundo.
World Vision tiene más de setenta años trabajando por llevar bienestar a niños, niñas y adolescentes en casi cien países del mundo, quince de ellos en América Latina y el Caribe. Trabajan con familias y otras instituciones en la creación de soluciones eficaces que permitan ofrecer a las personas “una vida que sí sea una vida” (World Vision). Su visión nace de valores como la inclusión, la justicia y la paz, y el deseo de llevar desarrollo social para todos.
En el evento se contó con la participación, de forma presencial y a través de plataformas digitales, de representantes de ambas instituciones. De parte de World Vision México, asistieron Miguel Ángel Laporta, director nacional de World Vision México; Gonzalo Macaya, director ejecutivo de Sostenibilidad; y Raúl Esparza Valencia, gerente senior de Alianzas estratégicas. Así mismo, Michelle Mitchell, directora de Relaciones externas en World Vision Latinoamérica y Caribe, participó en el evento desde Costa Rica a través de la plataforma Zoom; y Joao Diniz, líder de la misma región, participó desde Chipre. Por parte del Tecnológico de Monterrey, se contó con las participaciones de Karina Martínez Arguello, directora de Educación para el desarrollo; Ana Cecilia Torres, decana asociada de Educación continua e internacionalización; Jorge Blanco Martínez, vicerrector de Educación continua; y Martín López Méndez como. El evento, realizado en el Auditorio del EGADE en Monterrey, fue, en palabras de los participantes, “una celebración”.
Durante su participación, Joao Diniz compartió que el propósito del convenio es disminuir el rezago educativo de los niños, niñas y adolescentes de la región, específicamente en el área de comprensión lectora. Sobre el contexto al que se enfrentan, se refirió a cifras de la UNESCO, organización que, en el marco del Día Mundial de la Alfabetización, reveló que el 60% de los niños y niñas latinoamericanos en sexto año de primaria, no alcanza las competencias mínimas de lenguaje. En palabras de Diniz, este problema no solo repercute a largo plazo en sus vidas laborales, sino también en la formación de sus personalidades; este problema se vio agravado por el cierre forzoso de las escuelas debido a la pandemia por COVID-19.
La colaboración entre ambas instituciones tiene el propósito de resarcir el rezago educativo en América Latina y el Caribe a través del programa Formando Formadores, a través del cual se capacitará a docentes quienes recibirán herramientas y participarán en cursos de formación para que ellos, a su vez, puedan desarrollar en sus alumnos y alumnas la comprensión lectora y el dominio del lenguaje. Miguel Ángel Laporta, durante su participación, definió el proyecto como parte de la “hipoteca social que tenemos que pagar”, haciendo referencia a las palabras de David Noel, Rector Emérito del Tecnológico de Monterrey. Así mismo, mencionó que aún no se ha medido la brecha que dejó el cierre de las escuelas, cuyos impactos reales se ven tanto en la competitividad de los alumnos como en una sociedad “cada vez más violenta, compleja y polarizada, resultado de una tormenta perfecta”. Por todo ello, agradeció a las personas del Tecnológico por su colaboración en el bienestar de niños, niñas y jóvenes a través del fortalecimiento de la comprensión lectora, la cual es determinante para la formación personal todo ser humano.
Michelle Mitchel compartió que, durante la primera etapa del proyecto, se hará un pilotaje con 325 docentes, número que se espera aumente a 1500 docentes durante la segunda fase. Por el momento, más de 600 estudiantes del programa Youth Ready en América Latina, impulsado por World Vision a nivel global, ya tienen acceso al Centro Virtual de Aprendizaje del Tecnológico de Monterrey.
La firma de este convenio reafirma el compromiso de la Escuela de Humanidades y Educación, y de todo el Tecnológico de Monterrey, con la educación de las niñas, niños y adolescentes de América Latina, y es un paso más cerca hacia una sociedad más justa para todos.